1. Bio

Violonchelista y cantautora, como música clásica, participa activamente con varias orquestas, en una amplia gama de festivales y lugares internacionales. Como violonchelista contemporánea y compositora, actúa principalmente en escenarios europeos. Ha lanzado tres discos The Moony Sessions – 2015, Gap – 2019, Metamorphosis – 2020. También realiza actividades de coaching, con referencia al mundo creativo y musical, en las que cuida mucho el enfoque holístico del aprendizaje, en el trabajo, en la vida.

2. El poder de un sueño

Cuando era niña, tenía muchas ganas de ser actriz y, de hecho, pude actuar en algunos episodios de una serie de televisión cuando tenía 9 años. Fue muy divertido, pero a medida que crecí, lo que pensaba que era mi sueño se desvaneció para dar paso, inexorablemente, a la música. El poder del verdadero sueño es éste: sabe hacerse reconocer en medio de mil sustitutos. Sólo os pide a cambio un poco de coraje, el que hace falta, a veces, para dejar un camino que ahora parece trazado, para ir, descubrir y aprender algo más. Lo que te enriquece y te hace retomar tu camino más fuerte y consciente.

3. Mi viaje hacia la belleza real

Tengo suerte, porque puedo decir que he vivido más de un encuentro inesperado con la belleza. Que te pille por sorpresa ya es algo maravilloso, sobre todo para mí que siento curiosidad, por naturaleza, por lo insólito. Como cuando reevalúas a personas que, demasiado rápido, ya habías juzgado y categorizado. Quizás de forma incompleta, a veces incluso de forma negativa. Pero, ¿qué hermoso es entonces sorprenderse al cambiar de opinión? Cuando el destino te permite comprender que, en cambio, poseen almas abiertas, maneras amables, intereses y conocimientos. Ésta es la verdadera belleza: el descubrimiento inesperado del otro, la capacidad de admitir “no entendí”. Y entender de una manera nueva.

4. Lo que he aprendido y no olvidaré

Renunciar a tus aspiraciones nunca es una buena elección. Sí, en ciertas situaciones todavía puede ser un desafío reafirmarte como mujer, decir lo que quieres o hacer las cosas a tu manera, sin consecuencias. Pero esa no es una buena razón para rendirse. Lo que espero para cualquier mujer es una sociedad en la que, finalmente, si una mujer llega a la cima, digan que es porque es brillante, competente, decidida. No porque hubiera cuotas femeninas que cubrir o por insinuar algo peor. Espero que ese mañana avance rápidamente donde cada mujer sienta que puede ser ella misma y apoye de todo corazón a todas las grandes mujeres que la rodean.