1. Bio
Estudiosa del arte, autora, bloguera de arte y moda, periodista. Nacida en París, licenciada en Historia del Arte, periodista durante diez años, presentadora de televisión en Japón y corresponsal de Marie Claire. Se dio a conocer ante el gran público cuando lanzó su blog Miss Pandora, en el que hablaba, a través de su gusto personal, temas relacionados con la cultura, la historia y el estilo de vida franceses. Miss Pandora ganó rápidamente popularidad y finalmente se convirtió en un negocio a tiempo completo. Actualmente, Louise es creadora de contenido cultural y colabora con los museos e instituciones más prestigiosos. Su pasión particular es investigar y resaltar las personalidades y obras de mujeres en la historia del arte, olvidadas o nunca valoradas.
2. El poder de un sueño
A menudo, los sueños son la expresión más pura de nuestro significado en el mundo, son la voz de nuestra singularidad y, si bloquean la puerta principal, tienen el extraordinario poder de regresar por la puerta trasera. Esto es lo que me pasó con Miss Pandora: ser parte del mundo del arte siempre ha sido mi sueño, pero al principio me dijeron que no era adecuada: no era lo suficientemente académica, mis intereses eran demasiado específicos y quería una oportunidad en un campo dominado por hombres. Además, me interesaban el estilo y el maquillaje. Un sacrilegio, que sin embargo se ha convertido en mi gran aliado a la hora de diseñar mi propio camino, que hoy, con inmensa alegría, me permite dedicarme al arte, colaborando con los más prestigiosos museos e instituciones.
3. Mi viaje hacia la belleza real
Durante siglos nuestra belleza ha sido definida, utilizada y modificada según las expectativas de la mirada masculina, ahora finalmente estamos aprendiendo a rediseñarla según nuestra extraordinaria visión. Es mucho más que un valor físico, está profundamente arraigada en la singularidad de cada ser humano. Es un camino que necesariamente parte de tomar conciencia del valor que tenemos cada una de nosotras. Del valor que tienen nuestras ideas y nuestra inteligencia. Tomar conciencia del extraordinario orgullo que tenemos al ejercer nuestro derecho a la autodeterminación, a releernos por lo que realmente nos impulsa, nos anima y nos orienta, sin dejar que nos diseñen desde fuera. Entrar profundamente en esta dimensión es viajar hacia la verdadera belleza.
4. Lo que he aprendido y no olvidaré
Aprender a sentirnos más seguras de nosotras mismas, de nuestras habilidades. Lo que siento, lo que escribo, lo que elijo ser, importa. Debemos dejar de menospreciarnos o sentirnos avergonzadas cuando sabemos que hemos hecho un gran trabajo. Lo primero que quiero para las mujeres es que se sientan seguras. Tenemos derecho a no ser asesinadas, violadas ni comprometidas, ni físicamente ni en nuestras aspiraciones. Es una locura que todavía tengamos que luchar por nuestro derecho básico a existir.
