1. Bio
Escaladora, creadora de contenido para redes sociales, modelo y cofundadora de MAS, una plataforma multimedia dedicada a documentar el estilo de vida, la política, la cultura y los viajes relacionados con escaladores de diferentes partes del mundo. Tiene una larga experiencia como monitora de escalada y una sensibilidad especial para la enseñanza a niños y adolescentes. Entre los cursos que ha realizado, también el de Birth Doula Certification, en la Birth Arts International.
2. El poder de un sueño
Realmente no tenía ningún sueño concreto cuando era niña, solo sabía que quería aprender y experimentar tanto como fuera posible. Sabía que quería viajar, vivir en la ciudad de Nueva York y seguir escalando toda la vida. Hasta aquí todo bien. Le he dedicado esfuerzo y energía, pero cada uno de estos sueños se ha hecho realidad. Sentirte fuerte y en control de tu cuerpo ayuda mucho en la autoestima. Desde niña siempre he creído en el gran potencial de los jóvenes, y saber que a través de mi trabajo como docente y con los contenidos que ofrezco ayudo a que se sientan empoderados, escuchados, capaces y seguros, me llena de orgullo.
3. Mi viaje hacia la belleza real
Muchos de mis momentos de contacto con la belleza pasan por las percepciones de mi cuerpo. Desde el momento en que, siendo una niña hispana, descubrí que mi cuerpecito, trepando, podía recorrer las mismas rutas que los de hombres adultos mucho más fuertes que yo hasta cuando, después del curso para convertirme en doula, presencié mi primer parto: fue desordenado e intenso, pero nunca he visto nada más hermoso y sagrado. Cuando una mujer que da a luz se siente apoyada y segura, es maravilloso ser testigo de su fuerza. Como cuando escalas y te sientes cómoda en tu cuerpo, te olvidas de tu talla, te vuelves pura concentración y vas directa a la cima. Pura belleza.
4. Lo que he aprendido y no olvidaré
Escalar cada camino es como una especie de rompecabezas que tienes que resolver con tu mente y tu cuerpo. Y lo más sorprendente es que cada persona lo resuelve de forma diferente, en función de sus puntos fuertes y débiles, con su propio estilo único. Por eso odio la forma en que, con demasiada frecuencia todavía, la parte patriarcal de nuestra sociedad nos lee y quiere que nos sintamos. Ya no quiero verme más a mí misma como un objetivo de violencia potencial. Para nosotras las mujeres, simplemente sueño con poder sentirnos libres y seguras, en la vida cotidiana y en nuestras aspiraciones.